Leyendo las estrellas~. [Libre]

Río, sentándome, y despeinando el cabello del muchacho con una mano, alegremente.
- Hai, hai... Seguramente tienes razón... Demo, ¿sabes? Nos hemos desviado nuevamente al fin del mundo - digo riendo con pena, ya que principalmente fue mi culpa.
Me puse de pie y le tendí una mano.
- Bueno, ¿qué te parece si nadamos un poco? El lago tiene unas aguas cristalinas preciosas... - sugerí -. Aunque, pensándolo bien, quizás acabemos resfriados si nos metemos a estas horas... - añadí con una gota de sudor en la cabeza.

Sonrío algo apenada.
- ¡Hai~! - exclamo, revisando los bolsillos de mi pantalón corto.
Por más que haya sugerido nadar..., no traía ropa adecuada. Suspiré. Bueno, qué va, ya me compraría ropa mejor en otro momento~. x3 Quité el dinero y mi celular de los bolsillos y lo dejé en el suelo. Después, eché a caminar tranquilamente hacia el río.

Cuando llegué a la orilla, me ubiqué en un espacio más oscuro, donde me quité el short y la polera, dejándolos a un lado, quedando tan solo con las bragas, ya que por mi insignificante pecho, el comprar un sostén y usarlo era tan sólo un desperdicio. Entonces, me sumergí rápidamente y nadé hasta quedar cerca de Ryuubakugan. Si bien el agua era cristalina, no podría verme mientras estuviera bajo el agua, ya que era insuficiente la iluminación. Cuando salí a la superficie, me acomodé el mojado cabello hacia atrás para que no molestara.
- Hmm... Es verdad que el agua está linda, por más que esté congelada... =w= - murmuro, solamente con la cabeza fuera del agua.

Asentí, tomé aire y decendí lo más profundo que me permitió el impulso, si bien el fondo del lago no estaba lejos. El hecho es que amo nadar estilo subacuático y eso hice~. Me negué a abrir los ojos, principalmente porque podría contagiarme alguna infección, pero también era agradable basarse solamente en sentir el agua por todo el cuerpo y deslizarse por ella. Luego de bastante rato de estar explorando los fondos, salí nuevamente a la superficie en busca de aire.

Río y le salpico con un poco de agua.
- Un tesoro no... Pero está repleto de pececitos~. Sólo espero no toparme con una rana o un sapo - digo bromeando.

Me acerco y miro al pez.
- Uhmmm... Etto... ¿Sabes? En realidad existe en el Amazonas una especie de criatura acuática que ingresa al organismo a través de los órganos del sistema reproductor y se alimenta de las personas como si fuera un parásito - comenté.

Parmanecí volteando hacia el otro lado del río, riendo un poco.
- Hahahaha, oye, Ryuubakugan-san, te he dicho que son especies del Amazonas... Son autóctonas de allí y, por supuesto, nadie las ha implantado en los ambientes de aquí. Las condiciones de las aguas, climas, temperaturas, ambientes y zonas geomorfológicas son muy distintas. No podrían sobrevivir aquí~ - le informé, alzando un poco la voz para que me oyera.

Río más fuertemente.
- ¡Hahahahaha~! Claro, claro. Es que ACABO de decírtelo - bromeé, riéndome.

Volteo cubriéndome el pecho, al oír el agua, pudiendo saber así que ya se había vestido.
- ¿Has dicho algo~? Disculpa, es que no te he escuchado... ._. - dije, ya que había sentido su voz pero no pude distinguir qué decía.

Sonrío y ladeo la cabeza.
- Hai... Parece como si la superficie estuviera hecha de cristal... Brilla de manera preciosa... - dije para luego voltear y sumergirme otra vez hasta la cabeza.

Volví a darme vuelta.
- ¿Eh? ¿Has dicho algo otra vez...? - pregunté mirándole con intriga -. Mooo~. Si continúas hablando solo, voy a creer que estás loco, ne - bromeé riendo un poco y acercándome unos pasos.

Me golpeé la frente con los nudillos.
- Ya, claro... Qué idiota soy... Bah, olvida que te haya preguntado nada. Me lo hubieras dicho antes~ - dije, sacando la lengua afuera con pena.
Me sumergí hasta la nariz en el agua, y comencé a soplar, haciendo que se formaran burbujas en la superficie~.